jueves, 29 de enero de 2009

La Profecía



En Barant hay una profecía que dice que los viejos dioses tienen que morir y que los nuevos dioses andarán por el mundo para resolver sus disputas antes de subir al cielo. Y que entre esos nuevos dioses están la Pantera, el Oso y la Araña...Y que en la guerra entre la Pantera y la Araña el Oso tendrá un papel decisivo.



Y se supone que la Pantera soy yo... y la Araña mi hermano... y el Oso el príncipe Berg... al principio era escéptica con este asunto, pero han pasado tantas cosas desde que llegué que cada vez le veo más sentido a la profecía, ya que al final si es verdad que me tengo que enfrentar a Galathine, y que también es verdad que tuve que matar a un antiguo Dios... y al parecer las constelaciones de los viejos dioses se han ido apagando en los cielos dejando paso a otras nuevas.

Pero ni Berg, ni mi hermano ni yo tenemos nada de dioses...


lunes, 12 de enero de 2009

El Angel de piedra





En una plaza privada, escondida entre casas antiguas en medio del corazón de París, a la que se accede por dos cancelas enormes de hierro labrado hay una estatua compuesta de tres figuras aladas, dos con cuerpo de hombre y una con cuerpo de mujer.
La mujer ángel sostiene en sus brazos a uno de los ángeles, está tendido en el suelo, herido, su cara refleja dolor y las lágrimas corren por sus mejillas mientras ella lo acuna contra su cuerpo; la tercera figura le está dando la espalda a las otras dos con la cabeza girada en su dirección como echando un último vistazo mientras se aleja con las manos manchadas de sangre.

Es una imagen cautivadora, y sólo con verla a través de la cancela se siente un escalofrío que recorre la espalda. Todo aquel que la ha visto se ha sentido cautivado por esas estatuas aladas y la historia que muestran.